sábado, 19 de diciembre de 2020

Individualizar la calefacción

Aunque el tema hace ya tiempo que lo venimos tratando en nuestra comunidad, hasta ahora, por diferentes circunstancias, no se ha podido llevar a cabo. Lo cierto es que ahora tenemos que hacerlo. Antes de mayo de 2023, todas las viviendas tienen que contar con dispositivos que midan el consumo por vivienda en los edificios con calefacción centralizada. La forma más sencilla de cumplir la normativa es poner un contador a cada vecino, pero esto solo es técnicamente posible en las calefacciones dispuestas en anillo, que no es nuestro caso. Las instalaciones como la nuestra, estructuradas en columna —los radiadores de las distintas casas están unidos entre sí de arriba abajo—, requieren la instalación de un repartidor de costes. El Gobierno estima que el cambio puede suponer un ahorro medio del 24%, mientras que la Asociación Española de Repartidores de Costes de Calefacción calcula que puede estar entre el 20 y el 22%. Para lograr que la medida sea realmente eficaz, es imprescindible actuar sobre el conjunto, es decir, además de repartidores, colocar válvulas termostáticas en los radiadores, de manera que cada vecino pueda regular la emisión de calor, reduciendo o ajustando el consumo a las estancias, temperaturas y horarios que necesite.

lunes, 16 de marzo de 2020

Precauciones en las comunidades de propietarios ante el coronavirus


Publicado por el Colegio de Administradores de Fincas de Madrid


Ante todo, es importante evitar caer en alarmismos. Si bien aumentan los casos de personas infectadas por el coronavirus en España el Ministerio de Sanidad es muy claro al respecto: “No hay que adoptar mecanismos de protección innecesarios, como por ejemplo las mascarillas”. Esto no significa, no obstante, que no se deban adoptar otras medidas genéricas de protección individual. Se trata de una serie de acciones que tienen especial relevancia cuando estamos en contacto con personas que presentan síntomas, pero también cuando estamos en espacios de tránsito. Y aunque el tránsito en una comunidad de propietarios suele verse limitado a los residentes y al personal que trabaja en el inmueble, no está libre de ser una zona en la que es importante tener en cuenta las medidas de higiene aconsejadas.

Es recomendable que en la limpieza de las zonas comunes se utilice lejía o alguna solución desinfectante y que se preste especial atención a los elementos que se tocan con frecuencia, como pomos, interruptores o pasamanos

Estas acciones nos ayudan a protegernos no sólo ante el coronavirus, sino ante otras enfermedades respiratorias, como la gripe común. Desde el Ministerio de Sanidad nos indican la necesidad de:
1. Realizar una higiene de manos frecuente (lavado con agua y jabón o soluciones alcohólicas), especialmente después de contacto directo con personas enfermas o con su entorno.
2. Evitar el contacto estrecho con personas que muestren signos de afección respiratoria, como tos o estornudos.
3. Mantener una distancia de un metro aproximadamente con las personas con síntomas de infección respiratoria aguda.
4. Cubrirse la boca y la nariz con pañuelos desechables o toser o estornudar y lavarse las manos.
Dispensadores de soluciones desinfectantes
Dado que en las zonas comunes de las comunidades de propietarios es inevitable entrar en contacto con elementos que tocan otras personas y que pueden verse afectados por las secreciones de toses y estornudos, sería factible plantear la instalación de dispensadores de soluciones desinfectantes en áreas como el portal o el garajePero, en cualquier caso, sería suficiente con lavarnos las manos nada más llegar a casa.
También es recomendable que en la limpieza de estas zonas comunes se utilice lejía o alguna solución desinfectante y que se preste especial atención a los elementos que se tocan con frecuencia, como pomos, interruptores o pasamanos. Asimismo, no es recomendable utilizar un atomizador para aplicar el desinfectante.
El Gobierno de Sanidad descarta que sea necesario adoptar precauciones especiales ni con comida ni con animales para evitar esta infección. También indica que desde la Unión Europea no se ha adoptado ninguna medida adicional en relación a los controles oficiales que se realizan sobre las diferentes mercancías de uso o consumo humano procedentes de las zonas donde hay transmisión sostenida, por lo que no existe ninguna restricción ni recomendación específica relativa al movimiento de mercancías.

Aclaración sobre las válvulas termostáticas


Cada vez son más las comunidades de propietarios con calefacción central conscientes de los beneficios de instalar válvulas termostáticas en los radiadores. Estos dispositivos tienen varias ventajas. En primer lugar, ahorran: permiten disfrutar temperaturas en cada estancia según el uso e, incluso, programar o apagar la calefacción durante nuestra ausencia. De ese modo se ahorra energía y el usuario consigue confort cuando y donde lo necesita. Pero, además, también benefician a la instalación comunitaria en su conjunto, ya que para que las válvulas funcionen adecuadamente se ha de equilibrar hidráulicamente todo el circuito de calefacción.
De este modo llega caudal de agua suficiente a todos los radiadores, para que en todas las viviendas se pueda disfrutar del mismo confort. Con ello habremos conseguido que los pisos más alejados de la sala de calderas tengan calefacción y, al mismo, evitando que los residentes en otros tengan que abrir ventanas, lo que se traduce en confort para todos y menos gasto energético.

Ahorro en calefacción. 

No obstante, a pesar de los beneficios de este sistema, persisten algunos mitos inciertos sobre el uso de estos dispositivos que conviene desmontar, para terminar con las dudas e inquietudes de algunos usuarios. Uno de los más frecuentes es que si una vivienda cierra las válvulas de sus radiadores para ahorrar energía, las colindantes pagarán más. La realidad, sin embargo, demuestra que el ahorro medio en la instalación oscila entre un 25-35% y, dado que las principales pérdidas energéticas se producen hacia el exterior, en muros y ventanas, las pérdidas con las viviendas colindantes apenas influyen en el gasto final.
Otro mito con respecto a las válvulas termostáticas es que hay quienes esperan “tener calefacción siempre que quieran a la temperatura que quieran”, cuando en realidad esto depende de los horarios y la temperatura de consigna que haya acordado la comunidad. Pero sí se puede, gracias a las válvulas termostáticas, disfrutar de una calefacción a la carta, 24 horas al día, si así lo decide la comunidad. De hecho, disponer de un sistema de control como son las válvulas termostáticas permite poner fin al despilfarro energético que supone tener un sistema de calefacción sin ningún tipo de regulación y destinar esa energía ahorrada a tener calefacción todo el día.
Para hacerlo con éxito, recomendamos instalar una sonda ambiente en el interior de la vivienda más fría, que será la que determinará la temperatura de impulsión al circuito de calefacción en función de las necesidades reales y hará posible utilizar la energía malgastada durante el día para mantener el confort durante la noche sin incrementar el gasto. Las válvulas termostáticas, como hemos dicho, harán el resto en cuanto a ahorro energético y confort.

lunes, 9 de marzo de 2020

El ahorro con los repartidores

¿Se ahorra energía y dinero con los repartidores?


La instalación de repartidores de costes de calefacción y válvulas termostáticas permite ahorrar en calefacción una media de 24.7% en las viviendas que aún disponen de sistemas con calefacción central, según el "Estudio sobre ahorros derivados de la contabilización individual de calefacción en España" realizado por la Universidad de Alcalá.

El resto de los estudios consultados apuntan variaciones poco significativas y suelen mantenerse en una horquilla que viene a suponer por regla general un ahorro que oscila entre un 20% y un 30% del consumo habitual.

Las cifras de ahorro en euros son diferentes según los lugares en los que se haga el estudio pero suelen concretarse en unos 200 ó 300 euros de media anuales de ahorro por vivienda.

Así mismo, la propia directiva europea añade que el sistema de repartidores de costes de calefacción es más eficaz y más beneficioso cuando los propietarios cuentan con medios para el control de su propio consumo individual, que pueden regular a su antojo. Las válvulas termostáticas parecen el aliado perfecto en combinación con los repartidores de costes para mejorar en los consumos.

Otra gran ventaja añadida es que existen también sistemas de radiofrecuencia que permiten regular la temperatura deseada en cada dependencia a través de una pantalla táctil empleando válvulas termostáticas electrónicas.

jueves, 30 de enero de 2020

Repartidores de costes en la calefacción


En el acta de la última reunión (Acta 12/Dic/2019) queda recogido que cuando termine la temporada de calefacción, allá por el mes de mayo, se procederá a la instalación de los repartidores de costes para una contabilización adecuada de consumos por viviendas. Hasta ahora, en nuestra comunidad la calefacción se paga en función de unos coeficientes relacionados con el tamaño del piso y los radiadores del mismo, en lugar de hacerlo por el consumo que se hace en cada vivienda (en buena lógica, el que consuma más debe pagar más). Posteriormente los propietarios que lo deseen deben de proceder a la instalación de válvulas termostáticas en los radiadores, a fin de ajustar el consumo a sus necesidades (encender o no unos radiadores u otros, apagarlos por la noche o cuando se ausentan del domicilio, etc.)

En principio el objetivo de que cada cual pague en función de lo que consume se presume como más  lógico pero hay propietarios que consideran que las ventajas son poco apreciables en relación al gasto que supone.

¿Cómo se calcula el reparto de consumo con repartidores de costes de calefacción?
En esencia, el reparto de los costes de calefacción se hará teniendo en cuenta dos términos:

  • Un término fijo, que corresponde al 30% de  los gastos generales de la instalación como combustible, mantenimiento y consumo eléctrico. Se divide en % de participación de cada propiedad.
  • Un término variable, que corresponde al 70% restante y se reparte en base al consumo real, siendo éste el sumatorio total de todas las lecturas de repartidores de costes.
Convendría irse enterando (leyendo cosas relacionadas con el tema, hablando con amigos que lo hayan hecho, etc) para que cuando llegue el momento hacer una reunión, poner encima de la mesa todos los asuntos positivos y negativos de los que nos hayamos enterado y tener más elementos de juicio.